Nada más empezar la historia nos encontramos con un golpe de estado en Adro, liderado por el Mariscal de campo Tamas, quien viendo el mal manejo de la economía y de la ciudad por parte del rey, decidió poner solución, junto con los suyos, y liberar al pueblo y que deje de pasar hambre, pero todo esto desatará mas problemas de los esperados, habiendo no sólo problemas internos a cuenta de los realistas, si no también una guerra en las Nueve Naciones y una leyenda que apenas nadie recuerda pero en la que deberán empezar a creer. Una trama muy completa e interesante en la que por un lado tenemos a Tamas que tendrá que lidiar con todos los problemas políticos y estratégicos tras el derrocamiento del rey y por otro conoceremos a Adamat, un inspector retirado que tiene una memoria increíble que irá tras la pista de la Promesa de Kresimir. Tampoco faltará la magia, teniendo diferentes tipos de magia y poderes como son Los privilegidos, Marcados y Magos de la pólvora. Los personajes, tanto principales como secundarios, también son un punto fuerte en la historia y he disfrutado mucho conociéndolos y algunos de mis preferidos sin duda han sido Taniel Dos Tiros, hijo del Mariscal y uno de los mejores Magos de la Pólvora y Ka-Poel, su compañera salvaje. Después de haber terminado la novela, solo decir que estoy deseando que llegue 2022 para adentrarme en La campaña Escarlata, segundo libro de la trilogía. |