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¡Menudo viajecito por la España manchega! En este libro, el autor hace un gran recorrido por algunos de los enclaves más conocidos (y nos descubre otros) de las cinco provincias de la Mancha, a la vez que nos narra cómo un detective va en busca de unas pistas que le llevarán hasta uno de los secretos más codiciados por la sociedad. En general, la lectura es ágil y lleva un ritmo marcado, principalmente gracias a cada una de las pistas que se van dando. Además, me ha gustado que se vea una evolución en los personajes y también ese desenlace propio de las películas de acción. En cuanto a la forma de describir, he de ser totalmente sincera, quizá sea muy recargada. Si se redujeran el número de elementos en las enumeraciones y se dieran menos detalles al describirlo todo, el lector no desconectaría de la historia y habría más espacio para meter algo más de suspense e intriga. Eso sí, la gran labor de documentación, y el hecho de que una historia tan propia de las pelis de acción se ubique en España, dando a conocer nuestra cultura (como la Ruta de la Lana, la Ruta del Cid o la de la Orden de Santiago) y su riqueza, son un buen punto a favor. Se lo recomiendo a todo el que le guste la novela histórica con toques de aventura y romance. Y a todos los que se vean atraídos por el principal escenario de la novela: Castilla-La Mancha, ya sea por su arraigo o por sus ganas de aprender. |
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