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En esta historia vamos a conocer a Arlet, a la que debido a un ascenso se ve, de repente, mudándose de Barcelona a San Sebastián en tiempo récord, y cambiando su adorada sección de deportes por la de moda, que no es que no le guste, es que no tiene ni idea. Es una persona fuerte, que siempre ha luchado (y mucho) por lo quería, con una infancia difícil y con la sensación que nunca ha sido la prioridad de nadie. En la sede principal se encontrará con Jon, que es el jefazo del periódico, serio y responsable, ya que su vida esta basada, principalmente, en hacer lo que su familia cree que debe, hasta el punto de pagar el pato de sus hermanos, pero lo peor es que no sabe cuando fue la última vez que sonrió. La conexión, los tira y afloja y la atracción es algo que nos mantendrá enganchados a mas no poder. A él le encanta pincharla y ella es la horma de su zapato. Me ha encantado la forma de enlazarlo todo, el poder empatizar con Arlet en sus pensamientos, sentimientos (tanto en su vida como hacia Jon), formas de actuar y querer darle mas de un abrazo, pero también llegar a entender a Jon pese a cagarla una y otra vez. Los personajes secundarios son PERFECTOS, así, en mayúscula, Martín esa persona valiente y protectora, Irati, los hermanos de Jon… mención aparte a los padres de Martín, Andres y Claudia, ojalá en el mundo real hubiera mas gente como ellos. No puedo irme sin recalcar el respeto con la que la autora trata ciertos temas y como afecta eso a las personas de su alrededor. La pluma de la autora es fresca, ágil, con toques divertidos pero a la vez me ha hecho sentir muchas cosas. Es una historia que esconde mucho mas de lo que parece, sin duda, se ha convertido en mi libro favorito de la autora. Si queréis un enemies to lovers, canalla pero precioso, con piques, muchísima atracción y sentimientos que afloran desde lo mas profundo… es vuestro libro!😉 Le doy 4'5/5 |
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