Como dice una de las protagonistas, tenemos Príncipe azul, Princesa, Hada buena y Bruja malvada, pero he encontrado mucho más. Cuando dos personas están predestinadas, no hay nada que pueda evitarlo por mucho que la mala de la historia se empeñe, el destino existe y tarde o temprano se cumple. Max y Kat siempre fueron uña y carne, sobre todo en sus travesuras. Ella le acompañó desde el momento en que llegó a sus vidas y gracias a él no se sintió tan rechazada. La vuelta de Max en el momento en que lo hace, no consigue despejar todas las dudas de Kat, pero si le hace reaccionar y evita que cometa el mayor error de su vida. La pluma de Isabella nunca decepciona y aunque parecía que todo iba a acabar mal, la forma de darle la vuelta y la decisión de Kat gracias a la intervención de esa Hada buena, consiguen una resolución perfecta para todos, incluso para Owen. No puedo callarme la tirria que le tengo a "su señoría". Un envoltorio perfecto para un contenido que es basura. |