Este pequeño libro es de los que marcan porque pareciera que fue escrito con la sangre misma de los protagonistas. El estilo narrativo es tan intenso y brutal, hay un tal relieve de colores, sentimientos y sensaciones en una tierra árida que deja el corazón desollado y doloroso. Se podría asemejar a una tragedia griega con su coro antiguo compuesto por el enjambre de niños desvalidos. Esta novela está inundada por el color rojo. Un gran libro. |