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El primer libro de Toñito Malpica que tengo oportunidad de leer. La historia empieza con Maré un señor ya grande de edad que tiene una rutina establecida, pero un día se encuentra con unas llaves olvidadas, las llaves de la vecina del piso de abajo, Maré por alguna razón del sin sentido decide llevarse las llaves hasta saber qué hacer con ellas, y es ahí cuando empieza la travesía de este viejito encantador que me saco las carcajadas con sus ocurrencias. Lo bueno de esta novela es la prosa de Antonio, tiene una forma de escribir muy limpia, muy clara y que te deja avanzar sin detenerte a buscar el significado de alguna palabra rebuscada, dando así cátedra que no se necesita tener un gran léxico para hacer una buena novela. También está claro el rumbo que va tomando la novela, las situaciones por las qué pasa Maré y que nos hacen ser cómplices de sus decisiones, esperando que todo le resulte bien. Lo malo es que siento qué hay varias hojas de más, si bien es cierto que la lectura es muy amena, también hay veces que sentía que me quedaba estancada en la mente de Maré dándole vueltas a una idea que francamente se podía resolver en 3 líneas y no en 4 hojas como en algunas ocasiones pasó. Un aspecto que no se decir si era bueno o malo, es cuando al final de cada capítulo nos daban como un spoiler de lo que se iba a desarrollar en el capítulo siguiente, siento que eso quitaba un poco mis ganas de averiguarlo, ya que podía anticiparme a lo que pasaría. En general es un buen libro para pasar el rato, cortito y agradable. |
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