Primera y escalofriante lectura de 2022 (espero que esto sólo pueda ir a mejor). Una novela corta agobiante, oscura y llena de detalles de la pluma del gran lovecraft. Confieso que, aunque nunca me ha dado miedo ningún animal, peludo o con 8 patas, la cosa peluda que anda pululando por los tobillos del protagonista me ha hecho sentir muy incómoda y me ha dado verdadero repelús. En ningún momento me he identificado con Gilman, yo nunca hubiera ido voluntariamente a Arkham, pero también admito que alguien tiene que hacerlo y tratar de investigar lo que está pasando en la ciudad. No es lo más apropiado para empezar el año, pero sí que es muy recomendable para pasar un poquito de terror. |