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ABANDONADO en el capítulo 19 (página 193, 43% del libro). Algunos autores se centran tanto en avanzar trama, que olvidan que las historias se componen de más elementos. A Six Crimson Cranes le falta profundidad y carece de una atmósfera envolvente. El estilo de la autora es bastante plano y las descripciones del entorno son tan vagas que apenas se nota el trabajo de world-building. En demasiados momentos he sentido que peca del síndrome de la habitación blanca. Entiendo que hoy día muchos lectores quieren ir al grano y leen tan rápido que se saltan pasajes descriptivos, como si las novelas fueran películas y series de televisión en las que no es necesario dar ni un mínimo de contexto de los lugares en que se desarrollan las acciones. Está bien que se invite a imaginar, pero algo falla cuando casi todo el trabajo de completar el world-building se delega en los lectores. Aparte, los personajes me parecen insulsos y creo que la mayoría de diálogos solo sirve para rellenar páginas y resumir detalles y eventos (a veces de manera forzada) que la protagonista desconoce por estar narrado en primera persona. No he conseguido conectar. |
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