 |
Este libro es terror sobrenatural, del que primaba antiguamente. Está considerada una de las mejores novelas de terror de su época. Se publicó en 1943, por lo que el vocabulario es algo diferente al que estamos acostumbrados. Igual que hoy en día ya no se escribe este tipo de terror porque se considera bastante flojo. Cuesta un poco leerlo y se puede hacer denso pero la historia me ha gustado. No habla tanto de hechizos como me hubiera gustado, pero en los primeros capítulos si que puedes encontrar mucha simbología de protección. La historia está narrada desde el punto de vista del protagonista Norman, profesor de sociología de una pequeña escuela norteamericana, que descubre que su mujer Tansy practica la brujería. Él no cree en esas cosas por los que obliga a su mujer a dejarlo y quema todo los símbolos de protección y hechizos que había ido haciendo ella a lo largo de los años. Desde ese momento, la perspectiva de Norman sobre la brujería empezará a cambiar porque todo empieza a volverse contra él. Aún siendo sobrenatural, es muy convincente. Los protagonistas no me han atraído pero sí su historia. Y aunque me gusta el género de terror, no creo que lea nada más de este autor. |
>
