La mano izquierda de la oscuridad

En este libro, la autora plantea una sociedad donde no existe la dualidad hombre-mujer, sino que durante unos días al año (la época de kemmer), cada persona se transforma en uno u otro sin poder de elección, por lo que todo el mundo puede concebir. Esto hace que no exista desigualdad sexual, ya que la maternidad y la crianza de los hijos o las tareas del hogar no es algo relegado únicamente a las mujeres (porque durante la mayor parte del tiempo no son hombres ni mujeres).

También me ha llamado la atención el concepto de patriotismo. Por una parte, unos personajes consideran ser patriota atacar todo lo que venga de fuera y reivindicar a lo propio como lo mejor. Sin embargo, para otros, el patriotismo está más relacionado con sentir aprecio por la tierra, las gentes, las costumbres, etc.

A este mundo llega Ai, un enviado especial encargado de crear una alianza interplanetaria con el objetivo de ayudarse económica y tecnológicamente unos a otros. Sin embargo, no será fácil debido a la desconfianza que genera.

A pesar de no estar acostumbrada a la ciencia ficción y de haberme perdido con algunos términos, me ha gustado mucho aunque, como me suele pasar en este género, me interesa más el funcionamiento de la sociedad que la historia que cuenta. Seguiré leyendo a Ursula K le Guin.