A pesar de ir percibiendo a medida que avanzaba la lectura que había algo oculto y siniestro en el pasado de los protagonistas, resulta difícil entender que quien más debería quererlos y protegerlos es también quien más dolor ha causado. Una mente enferma que actúa protegido por su estatus y amparado por sus más fieles colaboradores. Es una historia que al principio descoloca, pero que a medida que vas adentrándote en ella, más te atrapa. El desarrollo es impecable. Pasa de un encuentro indeseado entre Mario, Pablo y Cristina propiciado por la muerte de su abuelo y lleno de rencores y discusiones, a un final en el que todo encaja gracias a la ayuda de varios secundarios. Un final en el que no todos reciben el merecido que deseamos, pero que no puede cerrarse de otra forma. Una lectura muy recomendable. |