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Santiago de Compostela, año 2000. Victoria Dupont recibe la llamada de una amiga de la familia comunicándole la muerte de su madre, con la que no tenía relación desde hacía años. Para Victoria su madre siempre ha sido una extraña y lo único que quiere es acabar cuanto antes los trámites para volver a su vida normal. Pero ya nada va a ser normal a partir de ahora porque cuanto más indaga en el pasado de su madre más va a descubrir sobre sí misma y sobre todos los peligros que se ciernen sobre ella. . Como su título indica, va de brujas. Y todo lo que sea de brujas me interesa. No sabía muy bien qué esperar cuando comencé la lectura de este libro pero ya os digo que eso se resolvió desde el segundo día. El primero, la introducción normal a cualquier historia, ya me dejó buen gusto, pero a partir de entonces la lectura discurrió con mucha fluidez y con mucho más interés, porque la historia de esta familia de brujas es enganchona y de esas que tienes ganas de continuar porque salseo, misterio y giros imprevistos no le faltan, y al final te das cuenta que te has tragado 600 páginas sin enterarte. Mención especial a todos esos mitos y leyendas galegas que van apareciendo a lo largo de todo el libro y que te hacen indagar en sus orígenes para disfrutarlos aún más. Pura fantasía perfectamente integrada en el misterio de una bruja moderna que está descubriendo la historia de sus antepasados y sus propios poderes. . Lo dicho, novela muy entretenida que cuenta una saga de brujas gallegas desde el principio, cuando la abuela de Victoria conoce al mismísimo Lucifer y hace un trato con él. Como podréis imaginar, no es Lucifer el peor de la historia, ni mucho menos, por el libro pasan personajes mucho peores y que no tienen cuernos . Pero lo mejor es todo el ambiente que rodea a la novela, la magia gallega, donde se hace realidad el dicho de que " haberlas, haylas ". |
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