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«Mr. Monorail» es una novela original y fresca, delirante y ágil. Una lectura entretenida en la que sentí que las páginas pasaban sin darme cuenta, disfrutando de su humor particular, intrigada por lo que iba a suceder y riéndome mucho en el camino. Kim Jung-Hyuk escribe este libro jugando y convirtiéndolo por dentro en un juego en todo sentido. Mono es un joven que inventa el juego de mesa «Hello, Monorail», que tendrá un éxito impresionante y será el emprendimiento que generará el punto de partida de un viaje de aventuras por Europa. Los jugadores -y los personajes de esta novela- se embarcan en este juego que sólo se puede ganar a través del ingenio, los engaños y los trucos. La vida y el tablero de «Hello, Monorail» se entremezclan, entra en escena una secta religiosa y el ritmo se vuelve vertiginoso. Los capítulos van cambiando la perspectiva constantemente entre sus personajes. Se suman dibujos y tablas que ilustran las páginas, diálogos y fragmentos donde la imaginación toma vuelo entre divertidos delirios e ironía. Las aventuras toman un giro hacia la ciencia ficción, el humor ingenuo y naif hacia lo negro. El libro nos plantea en su trasfondo una reflexión y una elección entre un mundo de estructuras y normas a cumplir, caminos establecidos o un mundo de libertad, elecciones, infinitas posibilidades y cambios librados al azar. ¿Cómo queremos jugar nuestra vida? Esta es una novela dinámica y diferente para sorprendernos, reír mucho y disfrutar de la lectura con liviandad. |
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