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Una decepción. Mezcla personajes ficticios con muchos comentarios y anécdotas del mundo del fútbol real, pero que digamos que no se integran en la narración, son como notas al margen que no vienen a cuento y quitan realismo a la novela. Los personajes son muy planos y poco creíbles, de esos muy guapos y a los que todo les sale bien, los mejores goutmets, los mejores amantes etc y la trama es insustancial con un final poco trabajado. Digamos que aquí lo más importante es el fútbol, y para eso sobra el argumento secundario, que debería ser el principal.
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