Menuda maravilla en todos los sentidos: en narración, sentimiento, honestidad, emoción, calidad y calidez. He de reconocer que no me llamaba demasiado la atención la idea de leer las memorias de un señor mayor por el contenido machista y misógino que podía encontrar... mi pareja, que fue quien me recomendó este libro, me aseguró que me sorprendería muchísimo y que no era el discurso basado en el privilegio, más bien al contrario. La sensibilidad del autor hace que empatices con su historia, que respires su aire y sientas, gracias a la bellísima manera que tiene de hablar desde el corazón, el peso de un mundo que ha sido cruel también para los hombres. |