El interés por el personaje de Godoy, protagonista de esta novela y paisano del autor, fue lo que me llevó a su lectura. Tras leer las biografías de Madol y Emilio La Parra, esta novela histórica o biografía novelada es un alivio narrativo que llena las lagunas que forzosamente las biografías académicas no pueden cubrir. Creo que se acerca más a una biografía novelada que a una novela histórica. Prácticamente todos los personajes que aparecen son históricos: Carlos IV, Maria Luisa de Parma, Napoleón, Fernando VII, Escoiquiz...El autor no inventa personajes que le sirvan para reconstruir una época sino que se da vida a personajes históricos reales de manera meritoriamente verosímil. La reconstrucción del Motín de Aranjuez y de los años de prisión y exilio de Godoy son muy vívidos. De lectura fluida, amena y narrativa tradicional, tiene más interés por el contenido que por la forma o continente de la novela que no deja de ser convencional. No obstante, es muy meritoria especialmente considerando que se trata de una primera novela. |