Ese chico

Con solo leer la sinopsis de este libro sabía que me iba a encantar. Y así ha sido, no he podido soltarlo hasta llegar al final.

Nada más empezar a leer conoceremos a Penélope. Actualmente, se encuentra corriendo y huyendo de un dueño y su perro, con una bolsa de caca de perro en la mano. La verdad que es una forma bastante peculiar de empezar una novela romántica. Pero nuestra Penélope es una mujer de armas tomar. Por su amiga Emily hará lo que haga falta, hasta coger un excremento de perro en un parque de Chicago. Durante la persecución, se esconderá dentro de una limusina de lujo que la llevará a una casa de ensueño. Podría ser esa la oportunidad que estaba esperando. Lleva mucho tiempo detrás de inspiración para crear al personaje de su nueva novela romántica y puede que el dueño de esta mansión sea “ese chico”. Pero ahora la pregunta es ¿Qué hará Penélope? Sobre todo, porque ahora mismo se encuentra en la casa de un rico desconocido sin su permiso.

Hasta aquí puedo decir. Para saber más, tendréis que leer la historia completa.

Como os decía un poco más arriba, esta novela me ha encantado.

La autora tiene un estilo de escritura muy peculiar. A través de una gran cantidad de diálogos y capítulos cortos hace que la lectura coja un ritmo tremendo y se lea todo super rápido. A eso hay que sumarle la gran cantidad de bromas e ironías que iremos teniendo por parte del personaje de Penélope. Es imposible no reírte con esas contestaciones tan únicas que da en todas sus conversaciones.

Así es como, en su conjunto, la novela se vuelve super divertida, amena, ágil y tremendamente adictiva. No sabes con que te vas a encontrar ni que va a pasar. Y justo por eso no puedes para de leer y reír. Es de esos libros con los que dices un capítulo más y lo dejo. Pero luego, sin darte cuenta, ese capítulo acaba convirtiéndose en media novela ja, ja.

La historia estará narrada desde el punto de vista de Penélope. Esta chica está muy loca. Sus pensamientos no pararán de sacarnos una sonrisa e incluso alguna carcajada. Aun así, he echado en falta algún capítulo narrado desde el punto de vista de Jake, nuestro protagonista masculino.

Los personajes tienen tanto potencial que piden a gritos tener más protagonismo. Esto es justo lo que ha pasado con Jake. Te quedas con ganas de verle más en acción, saber como piensa y conocer algo más sobre su vida.

El romance será de esos que echen chispas. Desde el primer momento notaremos que existe una gran tensión sexual entre Penélope y Jake. Ninguno querrá dar su brazo a torcer, porque son unos cabezotas. Esto hará que no puedan parar de pelearse entre ellos. Y ya sabemos que los que mucho se pelean, mucho se desean.

La química fluirá y las chispas pasarán a convertirse en una gran explosión que dará lugar a un romance de lo más peculiar.

El libro en sí es un gran cliché. Pero la autora logra llevar y dirigir tan bien la historia que no se hace pesado, sino todo lo contrario. Se convierte en una lectura super divertida y fresca que no puedes parar de leer, en ningún momento.

Jake será el típico chico perfecto, guapo y rico que puede conseguir lo que sea con solo un chasquido de sus dedos.

Penélope la chica rara, divertida y un tanto loca que viene de un pueblo perdido que nadie conoce.

Sus interacciones harán que, poco a poco, comiencen a conocerse y ver quien se esconde realmente debajo de sus fachadas.

Bajo la risa y las bromas de Penélope, hay una persona insegura, vulnerable y vergonzosa. Bajo la perfección y la arrogancia de Jake, encontramos a un chico amable, dulce y atento.

Penélope es escritora. Vive la vida como si se tratara de una novela romántica. Su plan era convertir a Jake en “ese chico”, el personaje que protagonizase su historia. Pero, con el paso de las hojas, nos daremos cuenta de que Jake pasará de ser “ese chico” a ser “su chico”.

Os aseguro que esta pareja es única. Una vez los conozcáis, no podréis parar de reír y querer saber más sobre ellos.

Los personajes principales me han encantado. Pero deciros que otro con el que también me lo he pasado genial es “Cam”, el mejor amigo de Jake. Es el típico niño guapo y rico. La diferencia entre estos dos amigos estará en que Cam es un ligón simpatico. Sus intervenciones me han parecido muy divertidas. Es el encargado de meter cizalla, constantemente, a nuestra pareja y de hacer el papel de celestino en su relación. Me ha gustado mucho la amistad que existe entre los dos chicos.

Lo mejor de todo, ha sido descubrir que Cam puede ser el protagonista de la próxima novela de la autora. Me encantaría ver como se enamora ya que, precisamente, en el libro presume de ser libre y no querer ataduras con nadie.

La única pega que le pondría a la novela es no haber podido saber algo más sobre la vida de los protagonistas. Me ha faltado información sobre sus pasados, sus vidas e incluso haber podido conocer un poco más a sus familias.

Es la primera novela que leo de Kim Jones pero, sin duda, estoy deseando hacerme pronto con otra de sus historias.

En conclusión, “ese chico” es una comedia romántica que os recomiendo mucho. Te ríes desde la primera página. En cuanto los protagonistas se conocen es un no parar. No puedes soltar el libro. Si os gustan este tipo de historias más divertidas y ligeras tenéis que haceros con ella. No os decepcionará.
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