Diría que se está convirtiendo en una de mis autoras favoritas. Sus historias me atrapan, su pluma es hipnótica, me seduce y me emociona. Llega a mí cuando necesito su historia, historias de superación, de amor, de personajes que enamoran. Esta vez nos cuenta la historia de Jud y Mick, sus sueños, sus miedos, los golpes de la vida y todo ello teniendo de fondo la fiesta anual de los Rivas, esperada por todo aquel que es alguien en los 80. Una historia cercana que atrapa.
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