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Un joven escritor, en lo más dulce de su carrera, decide ponerse en la misma situación que la protagonista de su próximo libro, amordazada y atada a una silla. Por poder escribir de primera mano las sensaciones que esta situación de vulnerabilidad provoca, una idea como cualquier otra, ¿no?Como parte del trabajo de documentación sobre el tema a escribir. Pide ayuda a su esposa y empieza de esta forma la experiencia más angustiosa y desgarradora que he leído jamás. Daniel Lonces, escritor de éxito, atado a una silla plegable de metal, con los pies sujetos a las patas, incapaz de liberarse, y sus vivencias durante tres días de auténtica desesperación, de impotencia elevada al máximo exponente. Es una lectura de las que dejan huella sensorial profunda. Vamos, que ya lo considero como una de mis mejores lecturas del año, y lo acabamos de comenzar. En ocasiones me han confundido los cambios de narrador, algo más abruptos de lo que son habituales en mis lecturas, y quizás ese sea el pero que le ponga. Me ha incomodado saltar de la mente del protagonista a otro narrador omnisciente que aparecía de tanto en tanto, aunque, paradójicamente, este segundo narrador aliviaba la sensación de asfixia y la profunda claustrofobia que te invade leyendo esta novela. Y otro aspecto que me ha patinado del tono general de la novela es cierto episodio sobrenatural del final al que no he encontrado mucho sentido. Enlace: Http://instagram.com/estherm.. |
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