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En “Un examen extraordinario” vamos a conocer a Allison y Colin, dos personas que han sido admitidas en el mismo prestigioso programa de doctorado de literatura medieval y que están unidos por más que eso: fueron pareja años atrás y van a competir por el mismo puesto de profesor adjunto. ¿Podrán las dos personas más competitivas del mundo dejar atrás su pasado y centrarse solo en conseguir ese puesto de trabajo? A lo largo del libro seremos testigos de su competitividad y la rivalidad de la que nunca se han alejado a pesar de haber roto la relación, conoceremos cómo fueron años atrás y qué les llevó a distanciarse, y viviremos con ellos el resurgir de unos sentimientos que creían olvidados. Debo decir que he disfrutado mucho este libro, pero no me ha encantado. Es bonito ver cómo resugren ciertos sentimientos y es superentretenido presenciar esa rivalidad, pero a medida que avanza el libro se me ha hecho demasiado aburrida e intensa en algunas ocasiones. Aun así, me ha gustado que con el tema de la rivalidad hagan entender al lector que no pasa nada si no se es el mejor siempre y que la rivalidad sana es posible. Hablemos de los personajes. Allison y Colin se parecen mucho, ya que ambos son competitivos como nadie, les encanta ganar y algo que me ha encantado es que, conforme avanza el libro, evolucionan muy favorablemente. La pluma de la autora me ha gustado mucho. Nunca la había leído y me he encontrado con una pluma fresca y amena que estoy segura que volveré a leer. En resumen, “Un examen extraordinario” es un libro sobre rivalidad y amor; un libro que nos muestra que la competición sana existe y que no pasa si no se es el mejor en todo. Si queréis un libro ameno y bonito, os lo recomiendo un montón. |
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