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La orquídea los tiempos es una lectura recomendada para alumnos a partir de 10 años. Edad que considero muy acertada, pues en la lectura encontramos formas de hablar y comentarios propios de los niños de esta edad. En cuanto a su portada, me gustan mucho las tonalidades seleccionadas para el fondo de la ilustración y esa diferenciación hecha entre el espacio dedicado al título, autor e ilustrador; y el ocupado por el dibujo, ya que enmarca y resalta a la perfección a los primeros. Siguiendo con las ilustraciones, en su interior hay bastantes, todas ellas en blanco y negro y dotadas de una gran expresividad y originalidad. En esta lectura nos encontramos con un grupo de amigos de 3.º, pero no se trata de una clase al uso, sino que sus alumnos son unos monstruos muy dispares y peculiares. Así, encontramos desde un niño esqueleto hasta uno con cuatro ojos, pasando por una que es prácticamente redonda y peluda, entre otros. Pero no solo los estudiantes son peculiares, también lo son los profesores. La historia comienza cuando, tras pedirles la profesora que lleven un objeto antiguo, un alumno lleva a clase una cajita de un antepasado. A partir de ahí se abrirá un camino de aventuras y enigmas. Algo que me ha gustado mucho es que hace al lector partícipe en la búsqueda de las soluciones a acertijos que los personajes deberán superar sin permitirse ni un solo fallo si quieren alcanzar su objetivo. El libro se divide en doce capítulos no numerados y bastante breves. Además, la letra tiene un tamaño aceptable y la prosa del autor está perfectamente adaptada a las edades a las que se dirige. Si a todo lo anterior unimos una trama atrapante, el libro, más que leerse rápidamente, prácticamente se devora. En definitiva, se trata de una lectura altamente recomendable para los lectores a los que se dirige y que, de ahora en adelante, incluiré en mi biblioteca personal de libros infantiles y juveniles que recomiendo y presto a mis alumnos. |
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