¡Liquidad Paris!

Me sigue chirriando los episodios jocosos de esta serie de novelas, pero tengo que decir que cada vez hay menos y por el contrario hay cada vez más episodios con crudeza y dureza que reflejan lo que tuvo que ser en realidad la IIGM.
Aquí tras el desembarco de Normandía, destinan a nuestro grupo protagonista a París y allí, vuelven a sobrevivir, sabiendo que ya la guerra está irremediablemente perdida, con lo cual la vida de la milicia es más relajada y ellos tienen menos disciplina, llegando a confraternizar con el contrario.
Al principio de cada episodio hay una parte en cursiva que relata con toda crudeza situaciones reales vividas durante la contienda, algunos ponen los pelos de punta.
Por cierto, y no es revelar detalles de la trama, pero París ni ardió ni se liquidó.