El chico y el perro

"El chico y el perro" se ha convertido en un libro muy especial para mí, y no solo por lo curioso que está escrito. Su protagonista se llama Tamon, un perro mestizo de pastor alemán y una raza japonesa que tras un devastador terremoto y un tsunami recorrerá una larga distancia para buscar lo que le queda de familia.

La novela está fraccionada en seis partes, cada una de las cuales refiere a la repercusión que tiene el perro para cada una de las familias con las que se va cruzando. El autor realza el increbrantable vínculo que puede llegar a forjarse entre humanos y canes, tan humilde y esperanzador,con una prosa sencilla, llena de parajes y nombres de lugares del lejano oriente.

Tamon se convierte para ellos en una especie de Dios protector, un amigo que te purifica el alma, un perro que siempre dirige la mirada hacia el horizonte. Es por eso que en cada peregrinaje, por llamarlo de algún modo, las personas que lo salvan de ciertas circunstancias saben que tiene que seguir su camino en busca de su verdadera familia.

Si que es cierto que el libro peca en algunos aspectos de repetitivo, sobre todo en el fondo de la trama de la historia de cada familia, pero aún así, me ha parecido un libro conmovedor, lleno de esperanza, y trágico al mismo tiempo. Perfecto para enseñar en valores y emocionarte.

Los que tenemos seres queridos y ya no están entre nosotros, este libro remueve todos esos recuerdos y los saca a la luz. Para mi, Tamon es Molly. Para ti, seguramente, tendrá otro nombre.