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Reconozco que este tipo de libros me vienen genial cuando estoy en bloqueo lector o cuando acabo de salir de una lectura que ha sido larga o pesada. El libro nos cuenta la historia de Margot y Jake a través de los puntos de vista de ellos dos, salteando capítulos entre uno y otro. La verdad es que hay algunos capítulos que me han hecho bastante gracias por lo surreal de algunas situaciones así que ya solo por eso el libro merece la pena. Margo es una muchacha de casi treinta años que lleva soltera casi un año desde que se separó de su ex cuando este le dijo que no quería casarse con ella. Este tras anunciar su boda con su nueva novia Amber, Margot decide marcharse una temporada a una granja para ayudar a una familia que vive allí a aumentar sus ganancias y allí va a conocer a Jake, un muchacho guapísimo, de esos que quitan el hipo, ex militar y con una trágica historia de amor a sus espaldas, su mujer murió. Ahora Jake es un joven bastante tosco, borde, cerrado y grosero que va a ponerle las cosas difíciles a Margot en lo que a la granja se refiere. Hay algunas partes del libro que no me gustan porque, en general, no me gusta en ningún libro y es que los protagonistas sientas esa atracción fatal a las dos horas de haberse conocido. Y tampoco me ha gustado que se hable de la “polla” del muchacho como si a los lectores nos hiciera falta saber de que tamaño tiene su miembro. Creo que son aspectos sin importancia en la historia y que no pintan nada en ella, es más, lo único que hacen es estropearla. Por todo lo demás, es una historia divertida, amena de leer, con un lenguaje sencillo y que te hace pasar un buen rato de lectura sin más pretensión que eso. |
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