Los baños del Almirante

Cuando me encontré ante Los baños del Almirante no consideré que pudiera hallarme ante una novela histórica tan original en la que épocas pasadas se entrelazan con el presente a través del hilo conductor que conforman estos baños mudéjares del siglo XIV en Valencia. El descubrimiento de una escritora tan sublime como ha resultado ser Dana Gynther se lo debo al programa Masa Crítica y debo reconocer que hacía tiempo que no me daba tanta pena pasar la última página de una novela que me ha conmovido en numerosos momentos. Es especialmente remarcable igualmente el trabajo de investigación de la autora estadounidense, no solo en torno a los propios baños, sino en general en relación a la historia de Valencia.

El libro comienza en nuestro siglo con Rachel que, tras un desengaño y una experiencia traumática, se muda durante un tiempo de Estados Unidos a Valencia con la idea de seguir su trabajo de investigación histórica. Pronto se enamorará del edificio llamado Baños del Almirante que, si bien en ese momento ya ha sido convertido en un museo, mostrará grandes enigmas que al lector le serán revelados a través de las historias de las otras tres protagonistas del libro. Así será cómo nos adentraremos en las vidas de Fátima en el siglo XIV, de Àngels en el XVI y de Clara a principios del XIX. Todas ellas estarán unidas por este edificio y sus vidas compartirán una serie de sinsabores que nos dará la sensación de reforzar este vínculo de una manera tan fuerte como para extenderse hasta el momento actual.

Es especialmente reseñable que la autora nos presenta a cuatro mujeres fuertes cuyas decepciones en la vida, lejos de llevarlas a un hoyo del que difícilmente pudieran remontar, fortalecen sus voluntades hasta puntos que consiguen conmover profundamente. Cada una de las historias está perfectamente ambientada en el siglo correspondiente, añadiendo elementos, costumbres y, en algún caso, personajes reales de la Valencia de cada período histórico. Es realmente brillante la forma en que la escritora introduce cada una de las historias de todas estas mujeres (que se cuentan de manera ininterrumpida, sin entrelazarse continuamente con la trama desarrollada en el siglo XXI) consiguiendo empastarlas a la perfección en un argumento bien hilado y sin fisuras.

Me ha resultado especialmente interesante también la percepción que dibuja la obra de las relaciones LGBT a lo largo de la historia con una representación más que notable en la novela. Reconozco que sentía una cierta pena cada vez que terminaba una de las tramas de cada una de las increíbles mujeres que conforman la novela, de tal manera que perfectamente podría haber leído un libro completo dedicado enteramente a cada una de ellas. Para concluir solo cabe añadir que esta manera de hacer narrativa de ficción mezclada con uno de los mejores ejemplos de novela histórica que me he encontrado (reconciliándome en cierto modo con el género) me empuja a querer saber mucho más de la obra de Dana Gynther en el futuro.