 |
Compré este libro el año pasado pero, para no perder las costumbres, se quedó sin leer. Aprovechando que necesito lecturas ligeras por mis dolores de cabeza, me decidí a rescatarlo de la estantería. Ha sido todo un acierto. Molly Carlisle es una británica de veintidós años que tiene tres trabajos para poder mantenerse y pagar la residencia de su abuelo enfermo. Uno de esos empleos es como profesora de inglés en la embajada de Djalia, y será esa ocupación la que la meterá en problemas cuando su alumno la secuestre. Azrael al Sharif es a sus treinta años el rey de Djalia. Lleva muy poco en el cargo y está intentando solucionar los problemas causados por la gestión del anterior gobernarte. Su padre fallece cuando él tiene diez años y se ve obligado a huir con su madre al país vecino donde será educado por su padrastro, el príncipe de Quaerin. La historia romántica me ha gustado aunque es cierto que todo sucede muy rápido, pero con una extensión de 160 páginas no hay mucho margen para dar rodeos. Se atraen nada más se conocen y de ahí al amor hay un paso, aunque ambos dan muchas vueltas antes de sincerarse y eso me gusta. También está genial que ella no se calle ni se sienta intimidada por el protagonista. La novela es muy entretenida y adictiva y me ha encantado. Se lee perfectamente en una tarde y engancha tanto que te la lees del tirón. No es la típica historia de la autora donde ella aguanta en silencio las mil perrerías que le hace el protagonista, y eso me ha gustado porque no he tenido la sensación de estar leyendo más de lo mismo. Enlace: http://entrelectoresylibros... |
>
