Aventura de los galos en Bélgica, donde van a comprobar si lo que ha dicho César (que los belgas son los más valientes) son ciertas. al llegar allí, establecen un juego para ver quién es capaz de destruir más fortificaciones romanas. Como siempre, plagado de referencias a la idiosincrasia del lugar que visitan: patatas fritas, mal tiempo, Manneken Pis,… Incluso la pareja de policías belgas de Tintín, Dupond y Dupont (Hernández y Fernández, para nosotros). La última ilustración del libro es un homenaje al cuadro “La boda campesina”, de Pieter Brueghel el Viejo. |