Quisiera amarte menos

Cuando lo empecé pensé que era una novela muy corta, un libro para llevar en el bolso y leer mientras esperas el autobús, haces fila en la frutería o tomas un café rápido. Sin embargo, en cuanto lo empecé a leer entendí que nada de lo que me rodeara lograría relajar la inquietud que me creaba.

Seis personajes, seis relatos que hilan una sola historia. Cada personaje con voz propia, con sus luces y sus sombras y que encarnan todo tipo de pasiones. Unas serán pulsiones positivas que nos llevan al amor y al deseo, otras serán negativas y nos arrastran a la obsesión y la violencia.

No hay nada de corrección en esta historia, ni censura ni filtro, ni un solo eufemismo para pasar por encima de lo políticamente correcto, sacudirnos y evidenciar realidades que es necesario ver.

Con un ritmo que no decae y no deja casi ni coger aliento ha sido mi primera lectura de Goransky. Y ya sé que habrá más después.