Nosotros somos el cambio: Jóvenes activistas por el clima

Este libro de gran formato está pensado para las personas que quieren contribuir de verdad para que el planeta sea más sostenible y justo. Su subtítulo "Jóvenes activistas por el clima" nos anuncia un enorme volumen lleno de inspiración, información y propuestas para llevar la lucha contra el cambio climático a la vida diaria. Pequeños gestos pueden significar mucho, por su repercusión sobre el entorno inmediato y su efecto multiplicador.
El volumen, rico en ilustraciones e infografías que sintetizan la información de modo claro y ameno, contiene seis secciones ("Infórmate", "Actúa en tu vida cotidiana", "Protege tu entorno", "Alza la voz", "Crea comunidad y forja alianzas", "Piensa en nuevas direcciones"), además de una introducción, un vocabulario y un índice temático. Es muy rico en información y consejos, que aparecen, sobre todo, en formatos gráficos, pero la columna vertebral son tres tipos de contenidos:
Las historias de vida sobre lo que han hecho jóvenes activistas por el clima reales, de todo el mundo, siempre animados por la observación de un problema cercano, son la auténtica alma de este libro. Poder conocer lo que han hecho Martha Payne, Susette Oñate, Kelvin Doe y otros muchos jóvenes del mundo, cómo inspiró a otros muchos y multiplicó sus efectos, es el mayor tesoro.
La segunda clave son las secciones "Zoom", que presentan de modo claro información contrastada sobre temas clave para la sosteniblidad, como las ciudades verdes, el movimiento maker, el poder, la biodiversidad... información bien actualizada que es un punto de partida ideal para la acción.
Y para pasar a la acción están las secciones DIY (hazlo tú mismo), que ofrecen en una página la información necesaria para ponerse manos a la obra con actividades que contribuyan, de un modo u otro, a la sostenibilidad: hacer una pancarta, montar un banco de tiempo, emprender un safari por tu ciudad, organizar un mercadillo... son solo algunas de las muchas ideas listas para tomar vida.
En un año que empezó con el recuerdo de la COP25 y el activismo de Greta Thunberg para luego ser cautivado por la pandemia del COVID-19, un libro como este es una fuente excelente para los jóvenes que quieran implicarse en un activismo basado en una información veraz y en las experiencias de otros jóvenes que marcaron la diferencia.
En él encontramos lo más actual sobre los problemas que afectan a los derechos humanos, la ecología, la naturaleza, la contaminación, el cambio climático, la biodiversidad, la tecnología, la energía... a la vez que propone, de modo realista, cosas que los jóvenes pueden hacer para mejorar la situación, desde el reciclaje hasta todo tipo de actividades creativas, manualidades e incluso recetas de cocina. Los enfoques de la autora sobre temas controvertidos como la protección del medio ambiente, el cambio climático, el efecto invernadero o el crecimiento económico, fomentan el pensamiento crítico y el diálogo, presentando en ocasiones diversos puntos de vista.
Cuando he acabado de leerlo he quedado más convencida que nunca de que todos podemos y debemos hacer algo por el planeta, y de que los jóvenes que lo lean volverán a él una y otra vez en busca de inspiración para pasar a la acción. Las historias de los jóvenes activistas me han impresionado y animado, y estoy convencida de que lo harán con con otras muchas personas. A todos quienes quieran dar este paso les recomiendo ese libro que, además de gustarme mucho, me ha animado a luchar por mejorar la vida de todos.