Madrid

De alguna manera, cada español tiene un vínculo con Madrid: unos por estudios, otros por trabajo, en ocasiones por ocio (ferias, espectáculos, etc.) y otros, sencillamente, porque es la capital de España. Madrid es una novela llena de curiosidades, anécdotas, reinados, cambios políticos, sociales y culturales. Aunque los madrileños la disfruten especialmente por sentirla más cercana, creo que es una historia absolutamente recomendable para cualquier español con un poco de interés histórico. Es la historia de la ciudad de muchos y la capital de otros.

La pereza, a menudo, nos hace alejarnos de los libros de historia. Antonio Gómez Rufo, ha conseguido aunar una magnífica documentación y plasmarla en una novela que, pese a su extensión, resulta una lectura ligera, amena, agradable y la mar de instructiva. Un repaso de cinco siglos de historia en los que podemos ir adentrándonos en pequeños ratos libres o combinando con otras lecturas, pero de una cosa estoy segura y es que todos cuantos se decanten por su lectura quedarán más que satisfechos.

Siendo de todos, Madrid nunca ha sido de nadie. de ahí su grandeza y su sencillez, su orgullo y su humildad, su carácter revolucionario y su dignidad. Bajo esta premisa, Antonio Gómez Rufo da inicio a una interesante historia novelada de Madrid, en la que ella se erige como protagonista indiscutible y el resto de los personajes sirven como engarce para movernos a través de tiempo. En ella ficcion e historia se dan la mano.

Partimos del año 1565, cuando Felipe II traslada su Corte a Madrid. Allí conoceremos a tres familias de cómicos que llegan a la ciudad con la intención de encontrar un empleo: Alonso Vázquez, Guzmán de Tarazona y Juan Posada junto a su esposa María de Tormes. Entre ellos se establecerá un gran vínculo que perdurará a lo largo de distintas generaciones, hasta el punto de considerarse familiares, aun sin tener ningún tipo de parentesco. Cada cual, con el paso de los años, tomará diferentes caminos y sus conversaciones nos servirán para ir conociendo las múltiples caras de Madrid a lo largo de su historia: cómo eran los espectáculos, cómo se desarrollaba el comercio y cuales eran los gremios existentes, de qué forma se acometían las decisiones políticas, etc. Mezclando con gran acierto historia y ficción pasaremos por lugares tan conocidos como La posada del Peine, La Puerta del Sol, La Plaza Mayor, los jardines del Retiro, El Palacio Real, etc.
Con estas tres familias y sus sucesivas generaciones nos vamos a ir moviendo en diferentes escenarios (político, social y cultural) dentro de la ciudad y asistiremos a la transformación de Madrid; una transformación que necesitó el paso de muchos años. A pesar del carácter afable y abierto de sus gentes, durante mucho tiempo, Madrid fue una auténtica cloaca. Acometer su saneamiento y establecer un plan de ordenación urbana no fueron tareas fáciles, pero con el paso de los años veremos como esa ciudad que crecía sin control y era un auténtico vertedero va mutando hasta convertirse en un referente dentro de las capitales europeas.

Conoceremos el origen de lo que hoy día es el teatro. Me ha gustado especialmente el retrato que hace el autor de los corrales de comedias y de los mentideros públicos (el antecedente de las tertulias de café). Si tuviera que quedarme con una estampa de la novela sería ésta porque ha conseguido trasladarme en el tiempo.
Madrid ha sido punto de encuentro de personajes ilustres. A lo largo de las páginas de esta novela van a desfilar muchos de ellos, no sólo escritores o pintores sino monarcas, dirigentes políticos, etc. entre los que cabría destacar a Lope de Vega, Quevedo, Calderón Goya, Góngora, Carlos III, José Botella, Tierno Galván, etc.

Sería tarea imposible intentar plasmar en una reseña todo lo que la novela aborda. Entre sus páginas tienen cabida temas tan dispares como el origen de la zarzuela, de donde viene la expresión el quinto pino, por qué San Isidro es el patrón de los madrileños, por qué a los madrileños se les llama gatos, por qué la Puerta del Sol se llama así, cómo se vivió el 2 de mayo de 1808 en la ciudad, cómo se creó el Cuerpo de Serenos de Madrid, etc. Capítulos tan especiales como el 16 que bajo el título Libros, libreros y librerías nos remontan al año 1800 para informarnos como eran las librerías en aquellos días y cómo se ejercía el control de "vigilancia intelectual".
La novela está estructurada en: Nota previa del autor, prefacio, treinta capítulos numerados de larga extensión, fechados y titulados más epílogo. Partiendo del año 1565 avanzamos cronológicamente hasta nuestros días para finalizar con los atentados de Once de Marzo de 2004, un capítulo y un silencio que, aún después de tantos años, nos toca muy adentro.

En definitiva, Madrid es una historia novelada que denota la exhaustiva labor de documentación llevada a cabo con el autor y que consigue captar nuestro interés con infinidad de datos curiosos a la vez que nos da un paseo a lo largo de varios siglos con una lectura amena, entretenida e instructiva. Eso sí, la recomendaría a aquellos a los que realmente les guste la historia porque no van a encontrar otra cosa en sus páginas.

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