Soy fiel seguidora de Plinio y Don Lotario, me encantan sus casos , pero en esta ocasión he de ponerle pegas a la historia. El caso resulta frío, un poco tristón, probablemente por el paisaje en el que se desarrolla, incluso los propios protagonistas resultan poco cercanos. El final me pareció desagradable y poco creíble a diferencia de todas sus anteriores historias. |