Este clásico de teatro de Federico García Lorca, llevaba tiempo en mis estanterías y no me perdono haber tardado tanto en leerlo. No sólo por ser de quién es, sino por lo que oculta en su interior. Bernarda es una mateiarca ruda, mandona y cruel que se acaba de quedar viuda y somete a sus hijas de una manera autárquica. Cada hija tiene inquietudes diferentes, pero en lo que si coinciden es en el temor a su madre. |