Diego es un chico peruano, superviviente de un holocausto, que con 5 años fue adoptado por Alicia y Bernardo, una pareja española de clase media. El libro nos narra lo que sucedió antes y después de la adopción y hasta el momento actual. Está narrado a tres voces: por Bernardo, Alicia y Diego, que nos contarán en primera persona su versión de los hechos durante todo este tiempo. Diego tuvo una adolescencia complicada. Se le juntaron varias cosas: el hecho de ser un niño adoptado de distinta raza de la de sus padres y los problemas de aceptación que esto le acarreó, no conocer sus orígenes y los propios problemas de la edad. Esto hizo que se alejara de sus padres. Con Alicia rompió su relación completamente y con Bernardo mantuvo el contacto pero no de una forma distendida. Ahora Alicia se está muriendo y avisan a Diego para que se despida de ella. La autora nos narra los sentimientos y pensamientos de los protagonistas de una manera que he sido capaz de empatizar con ellos totalmente. Una historia muy dura pero a la vez muy interesante que me ha hecho conocer los entresijos de lo que puede conllevar una adopción y que no siempre todo es de color de rosa Sin duda una novela que recomiendo porque la historia me ha parecido magnífica. |