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Zoe O'Connor es la hija mayor y rica heredera del imperio creado por un matrimonio español que se mudó a Los Ángeles en busca de nuevas oportunidades. Zoe vive en una casa con playa privada en Los Ángeles, es simplemente perfecta, inteligente, bella, tenaz, constante, con mucho sentido del humor, fuerte, con un trabajo y economía estable y una familia un poco peculiar pero que la quiere con locura. Lo único que Zoe no tiene es una persona a la que amar, que la ame por completo (no a su dinero) y que comparta con ella su maravillosa vida. Irion Miller es un hombre al que la vida le ha curtido y le ha enseñado que no puede fiarse de nadie. Es atractivo, fuerte, inteligente, trabajador y con un cuerpo que para la respiración. Ha crecido en un barrio muy pobre con muy pocos recursos económicos, además, tiene un largo historial de antecedentes penales. Una noche, sin que nadie se lo espere, Irion se cuela en la playa privada de Zoe (Ojazos como él la llama) con un grupo de amigos y, desde ese momento, sus vidas cambian por completo dando un giro de 180º y poniéndolas patas para abajo. Una historia repleta de confidencias, tiras y aflojas, prejuicios, amor, rencor, un viaje inesperado, pasados que son difíciles de afrontar y momentos cargados de erotismo que hacen que no puedas dejar de leer en ningún momento. Los personajes secundarios no pueden dejarse de lado porque, si bien es cierto que Zoe e Irion están perfectamente descritos y creados con el amor y la ternura que desprende Anabel al escribir, personajes como Kimberly, Kenneth, John y Caroline están creados también con mucho cariño y dedicación sin que les falte detalle alguno. Kenneth es el guardaespaldas de Zoe y sólo os digo que se merece su propia historia, ahí queda eso. Kimberly es la hermana pequeña de Zoe, gracias a ella podemos descubrir la relación de los padres de Zoe con cada una de sus hijas y la historia de la familia. Caroline es una de las pocas amigas que tiene Zoe, youtuber e influencer que se hace apodar «The man-hater». John es la persona de confianza de Zoe, tanto a nivel personal como a nivel laboral, es su mano derecha. La pluma de Anabel es fresca, actual y consigue mantenerte en vilo a lo largo de cada capítulo. Es una historia romántico erótica, increíble y que no ha dejado de sorprenderme. Refleja a la perfección las distintas realidades y clases sociales que hay en EEUU así como las maneras de ser y problemas que se derivan de cada una de ellas Debo de decir que no me esperaba en absoluto una historia como esta, y mucho menos su final y su epílogo, pero me ha enganchado desde el principio hasta el final, he reído, llorado y disfrutado con los personajes y su peculiar historia como hacía mucho que no disfrutaba de una historia. Es una historia emocionante, vibrante, divertida y a la vez triste, real como la vida misma y muy recomendable para leer este verano. |
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