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Crissie es una joven agente a la que en colaboración con Scotland Yard le asignan la protección de Jeff, para ello se hará pasar por una estudiante más, escondiendo su identidad y vigilando a Jeff como una compañera de clase. Por otro lado, Jeff es un hacker que acaba de delatar a los miembros de la banda de atracadores de bancos con los que trabajaba en Londres, en caso de que alguno de los miembros intente tomar venganza es trasladado a Glasgow donde tendrá que hacerse pasar por un estudiante de universidad como medida da protección. Ambos se conocen en la universidad escondiendo sus identidades, lo que ninguno de los dos esperaba era que con el paso de los días y al pasar tanto tiempo juntos empezarían a sentir algo por el otro. Pero el deber de Crissie es vigilar que nada le suceda a Jeff, manteniendo su identidad en secreto, por otro lado, Jeff no puede arriesgarse a ponerla en peligro. Un libro donde la historia de amor entre los dos protagonistas se desarrollara poco a poco y enfrentándose a varios obstáculos, el más importante revelar al otro su propia identidad, con unos personajes secundarios que ayudaran y otros, en cambio, que harán dudar a nuestros protagonistas. Es un libro con un ritmo un poco lento, donde me habría gustado encontrarme un poco más de acción teniendo en cuenta cual es el peligro al que se enfrentan. |
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