Cristal. La guerrera esmeralda

El libro nos cuenta la historia de Cristal desde dos puntos del tiempo, o más bien, la historia de dos Cristales: la Cristal que un día fue y la Cristal que es ahora.
Narrado en primera persona en algunas ocasiones y en tercera, aunque realmente lo narra la misma persona, en la mayor parte del libro, Cristal nos cuenta como llegó a convertirse en la Asesina de Escarcha.
El principio del libro viene de la mano de la Cristal del presente que se presenta, tras ello, empieza a contar la vida de la Cristal que fue: La historia comienza cuando, tras la muerte de su abuela y su internamiento en un orfanato, Cristal recibe la visita de un hombre llamado Andrea, que dice que puede sacarla de allí si ella quiere. Cristal acepta y se marcha con él.
Desde ese momento su vida cambiará por completo cuando se va a vivir a la casa familiar de Andrea con la familia de éste, en la que todos parecen ser muchos años más joven de lo que realmente son. ¿Qué hizo que la pequeña Cristal, que era querida por todos, se convirtiera en la Asesina de Escarcha? Tendréis que leer el libro para saberlo.
En un principio, la pluma de la autora no me gustó mucho, la encontré con poca fuerza, como con poca seguridad, pero, y es algo que he apreciado mucho, la escritura ha ido cogiendo seguridad y fuerza a medida que el libro avanzaba. He podido notar una evolución en Paula a medida que iba escribiendo el libro. Es como si Cristal y Paula hubieran ido evolucionando a la vez.
En otros autores se puede apreciar una evolución de un libro a otro en su manera de escribir y contar las cosas, pero esa evolución la he visto con la autora de este libro en un mismo mundo de papel y creo que tiene bastante mérito.
A pesar de que, como os he dicho, en un principio la manera de narrar los hecho no me gustaba para nada, la historia si que me gustó en un principio y aunque mi mente no pudo evitar relacionar algunas cosillas sin importancia con otros libros como Cazadores de Sombras, Paula ha conseguido crear un mundo bastante único.
Con respecto a los personajes, aunque hay algunos que solo podemos saber de ellos superficialmente y pienso que debería haber ahondado más en ellos como por ejemplo en Cheo, los principales están bastante bien conseguidos, con una base firme. Un claro ejemplo de ello es la protagonista, Cristal: Odié con toda mi alma a la Cristal del presente, pero la del pasado me pareció entrañable. Vemos el crecimiento de Cristal a los largo de los años y después la razón que la llevó a ser quien es en el presente. Angelo es un personaje que aporta a la historia el toque cómico, pero también ha aportado esa sensación de querer abrazarlo y consolarle. Andrea es un claro ejemplo de fortaleza. Y Luca, bueno, Luca es puro amor (No hace falta decir que es mi favorito aún con sus equivocaciones).
La relación amorosa que hay en el libro me ha gustado bastante debido a que se ha visto como se desarrollaba poco a poco, si no con total lujo de detalles, con bastante claridad.
El final es bastante abierto, de lo cual no me quejo porque me gustan los finales abiertos siempre y cuando tengan sentido. Pero si que es cierto que me quedó como "¿DÓNDE ESTÁN LAS PÁGINAS QUE SIGUEN? NO ME PUEDE QUEDAR ASÍ" Pero nada, el libro acaba ahí. Sí creo que fue un final bastante rápido, bastante precipitado, pero aún así, como he dicho, no me disgustó.
En conclusión, la historia de Cristal nos adentra en un mundo donde el amor juega un papel muy importante en el destino. Una historia que aunque creo que llegará a sorprenderos. Para mí ha sido una de las mejores lecturas de lo que llevo del año.

Reseña del blog en 2014