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Llevaba mucho tiempo con ganas de leer este manga y tenía mucho hype, pero no me ha decepcionado. Si bien es cierto que este primer tomo es un poco introductorio, creo que es una introducción necesaria. El dibujo me ha sorprendido para bien, creo que transmite muchísimo, consigue transmitirte la angustia de Ryo, al no sentirse a gusto consigo mismo. Y bueno, Jin es un cachito de pan, al que ya quería desde su primera aparición. Me llama mucho la atención todo el tema graffitero y del diseño de ropa, tengo ganitas de ver cómo van prosperando nuestros jóvenes empresarios.
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