 |
"El crimen de Orcival", de Emile Gaboriau. Una madrugada de verano, Jean Bertheud y su hijo (cazadores), se dirigen al río del pueblo de Orcivel para pescar; allí, en la orilla, encuentran el cadáver bañado en sangre de una mujer (la condesa de Trémorel). Luego de discutir sobre avisar o no a las autoridades, deciden comunicar lo sucedido al alcalde y al juez de paz. Las autoridades estudian el cuerpo de la condesa, entran al castillo y descubren sangre y muebles caídos por todo el hogar. La escena da a entender que fue un robo violento que terminó con la muerte del conde y la condesa. Los sospechosos son los que encontraron el cuerpo y un sirviente del castillo. Sin embargo, es enviado desde París el detective Lecoq, quien analizará los hechos desde otro ángulo y cambiará el curso de la investigación. Genial novela de Gaboriau. Es larga, pero se lee rápido. El ritmo es acelerado, pues el autor amaba el formato de folletín. Después del maestro Poe, fue uno de los primeros en dedicarse a la novela policial y el que más influyó en el argentino Raúl Waleis (primer escritor de novela policial en lengua española). |
>
