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Siempre he dicho que de todos los libros se aprende algo, de los malos también. Leí el libro en primer lugar porque soy entusiasta del camino de Santiago, en segundo lugar porque de lo que trataba el autor era tierra conocida, mi tierra, Salamanca. Y ahí va mi crítica: Está pésimamente escrito, nivel aunque le ayude su hija, es de cuarto de primaria; supongo el nivel en el que trabaja el autor , que puede lo visto y he podido descubrir, que es arto difícil, maestro de profesión. Y claro cuando se refiere al pago por tierras salmantina, y a todo le pone pegas, de todo se queja, no ve nada bien... pues eso la verdad me enerva, parece que ha venido a colonizar tierras salvajes. Y viene de la Mancha . Se piensa que es el Quijote que sale para enderezar entuertos. No tiene ni idea ni se documenta de lo que dice. Mira que he leído libros malos, y procuro acabarlo todos, y este a pesar de todo he acabado para tener argumentos y decir lo anterior. Pésimo no, lo siguiente. No hay ningún comentario histórico que sea riguroso. Ha escrito un libro como a quien le da por hacer un condón a ganchillo. Vergonzoso. Espero no hayan mangado a mucha gente.
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