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Roberto Doni es un magistrado superior en Milán, un hombre de 65 años de edad que ha regido su vida bajo la base de ejercer su trabajo de manera ética y sobre todo tratando de ejercer la ley bajo la premisa de basarse en hechos presentados y sobre eso tomar la decisión de culpabilidad y o de inocencia. Esto es así hasta que un día se presenta ante él una periodista que lo hace ver el prisma de verdades a medias o mentiras a medias, de pruebas no presentadas, de situaciones no conocidas de un hombre que ha sido culpado de asesinato, un inmigrante pobre sin dinero, sin conexiones y donde los únicos que pueden hablar a su favor no lo hacen por ser personas sin papeles que no harán nada para poner en peligro su estancia en Italia. Es ahí donde Doni se topa con la situación de manejar un juicio con lo que tiene sobre el papel o bien tomar la decisión de dejar en libertad a alguien que el sabe inocente pero que carece de pruebas de ello y entra en una lucha interna de hacer lo correcto o jugarse su carrera e incluso su vida entera. El estilo narrativo de Fontana es exquisito, también sin duda ha puesto sobre la mesa un problema de ética personal, de moralidad y de salirse un poco de la burocracia en la que muchos funcionarios públicos están sumergidos, sin embargo aunque me ha gustado mucho, también es verdad que me ha dejado con ganas de mas. Un libro que si bien me ha gustado mucho por su estilo, su forma y su manera de proponer situaciones reales de la vida. |
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