Love me please

Versión cómic de la biografía de Janis Joplin. Desde luego, a diferencia de una biografía al uso, este formato se hace mucho más dinámico y ágil de leer si no estamos muy acostumbrados a leer biografías de un único personaje histórico, ya que no es lo mismo que leer narrativa.

Sin embargo, si por el contrario esperábamos encontrar efectivamente una biografía bastante completa, esta se queda desde luego muy justa.

Al principio me pareció, precisamente por ello, el formato ideal para acercarme a la vida de una artista que me encanta, que siempre me había atraído, y de la que sin embargo no conocía gran cosa más allá de su música. Pero por desgracia este libro amplía poco más de los cuatro datos que ya tenía de ella. Y la sensación que me da es que no es por falta de acción en la vida de Janis, si no por como se ha planteado el libro.

Mi sensación, sin tener ni idea porque desconozco sus motivos reales, es de que el autor ha querido hacer su particular homenaje a Janis Joplin sin romperse mucho la cabeza en documentación o en seleccionar los momentos más representativos de su vida, si no que ha seguido totalmente la línea cronológica resumiendo en 160 páginas la vida de la artista sin hacer aparentemente incapié más en unos aspectos que en otros, ni destacando unos acontecimientos más que otros. Y para mí ese enfoque ha hecho que quede totalmente plano un libro que trata de una mujer que era explosiva en el escenario.

Además, no me ha gustado que el interior del libro no siga (en la medida de lo posible y coherente) el color de la cubierta. Las ilustraciones de la portada son una explosión de color y de flower power que inmediatamente identificamos o atribuimos a la imagen que nos viene a todos a la cabeza se Janis Joplin. Desde luego es de esos libros que dan ganas de comprarlo solo por la cubierta. Sin embargo, en el interior, la historia no sigue esa línea de colores. La gran mayoría de la historia resulta ser un cómic totalmente neutro en cuanto a color, que podría contarnos la historia de Janis o de cualquier otro artista, porque pierde la esencia de la cubierta que habría hecho que casi con cualquier viñeta supieses que esto va de Janis Joplin. Aunque intencionadamente intenta ir de menos a más en lo que al color se refiere, finalmente son muy muy pocas páginas justo al final las que tienen ese colorido y aún así no es exactamente el mismo estilo. La última cuarta parte del libro es la mejor en cualquier caso.

La traducción del francés tampoco me ha convencido en algunos momentos. Tiene algunas expresiones calcadas literalmente cuando en castellano no se ordena así la frase, resulta incorrecto y en un caso en concreto directamente no tiene sentido, no se entiende, no existe decir eso en castellano. En fin. Hay varias expresiones que no están bien adaptadas.

Por último, destacar el envío impecable de la editorial Aloha. Muy cuidado. Y la edición de buen tamaño, en tapa dura y con papel bien grueso. Así da gusto.