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El autor expone la historia de muchísimas familias, cuyos integrantes durante los años del stalinismo y más allá, perdieron su libertad e incluso su vida en los gulabs. Familias desmembradas bien por alguna opinión (la comida está cara) o por sus orígenes sociales (ser hijos o parientes de un kulak). Testimonios desgarradores sobre el sufrimiento humano y el miedo frente al totalitarismo. El sistema de toma de rehenes para obligar confesiones, el silencio, las ejecuciones, las venganzas, la desmoralización, el falso patriotismo. Frases con las que aprendieron a vivir: hoy te toca a ti, mañana me tocará el turno a mí; cuando menos sepas, mejor va a ser tu vida, no se puede hacer una tortilla sin romper algunos huevos. Reflexiones como: ¿qué sentido tenía discutir con un creyente? Muy muy recomendable.
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