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Me ha gustado mucho el último libro de Pilar Eyre. La historia se desarrolla en Barcelona y transcurre entre 1968 y 1992, reflejando los cambios producidos en la ciudad y retratando a la perfección la sociedad de esta época. Invita al lector a recorrer los ambientes más selectos de la ciudad, pero también los más degradados. La novela arranca con la puesta de largo de la protagonista, Silvia Muntaner, cuya familia está arruinada, pero vive con la esperanza de que su hija haga un buen matrimonio, aunque sea de conveniencia. Pero para Silvia la vida tiene otros planes. A esta familia no solo le perseguirá la ruina, también los secretos, los amores prohibidos y algún que otro escándalo. Nos encontramos con dos personajes centrales, de los que dejan poso: Carmen, la madre, y Silvia, la hija, dos mujeres cuya relación maternofilial está marcada por el salto generacional. Esta novela, narrada con la ironía habitual de Pilar y con un componente autobiográfico, relata situaciones reales vividas por la escritora o que en su día acontecieron a su alrededor. En palabras de la autora, es su mejor libro. |
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