No quise meter la pata, no quise tener muchas expectativas sobre este libro, porque como El bosque de las cosas perdidas me había enamorado perdidamente, tuve miedo de que este me decepcionara. Por ese motivo me introduje en él con total tranquilidad, dejando que me sorprendiera, descubriendo poco a poco su historia, profundizando en sus personajes y disfrutando de la oscuridad y de la maldición que rodea al pueblo sin esperar nada a cambio.
|