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Leer a Verónica Mengual es una apuesta segura, así lo demuestran sus novelas, por lo menos todas las que he leído de ella. Aquí nos ofrece una historia sencilla, entretenida, y escrita de tal forma que atrapa al lector desde la primera página hasta la última. El conde de Monty piensa que ya es hora de que su hermana, Lady Briana contraiga matrimonio. Para ello decide organizar una gran fiesta en su mansión del campo, con el objeto de invitar a lo más selecto de los caballeros de Londres y que de ahí pueda surgir algún pretendiente para ella. Sin embargo, Brianna no está por la labor de casarse, a no ser que sea con el coronel Frederick Burns, buen amigo de su hermano y del que lleva enamorada toda su vida. Cuando era poco más que una niña, Briana le declaró su amor, poco antes de que aquel se marchara a la guerra, aunque ella ya sabía que él no la correspondía y que nunca lo haría. Durante los años siguientes, ella ha sido feliz amándole en silencio y renunciando al matrimonio. El coronel Burns regresa de la guerra con heridas en el cuerpo y en el alma. A pesar del horror que ha tenido que soportar los últimos cuatro años, no ha podido olvidar a la dulce muchacha que la noche antes de partir, le dijo que le amaba. Frederick siempre se sintió acomplejado por una pequeña tartamudez al hablar, y ahora que ha vuelto con una cojera, piensa que ella ya no le aceptará. A pesar de todo acepta la invitación del hermano de Briana para asistir al baile. El primer encuentro entre los dos es de lo más insólito. Briana sigue enamorada de él y él de ella, pero cada vez que se encuentran, durante el tiempo que el coronel permanece en la mansión, siempre sucede algún imprevisto para que cada uno piense que el otro le rechaza. Y así entre enredos y malentendidos da la sensación de que estas dos personas están destinadas a no unirse nunca. ¿Será posible la unión entre ellos? Frederick y Briana forman una pareja encantadora, dos personas que tendrán que superar sus propios miedos e inseguridades y determinados imprevistos para poder estar juntos. Junto a ellos, los demás personajes serán decisivos en la historia. A destacar, el vizconde de Lemory, el incansable pretendiente de Briana, con el que tendrán lugar algunas de las escenas más divertidas de la novela. Y no hay que olvidarse de Angela, la cuñada de Briana, una mujer de carácter que ayudará a Briana en todo momento para que esta pueda conseguir el amor de Frederick. La excelente pluma de la autora nos ofrece una historia tierna, entretenida, y con momentos muy divertidos. Con un ritmo ágil que hace que no decaiga en ningún momento y que enganche desde el principio. Un coronel para lady Briana constituye la primera novela de la serie Soldados valerosos de Verónica Mengual, de las primeras series de la autora, y en ella ya se perfilan los protagonistas de las dos siguientes historias. Por un lado, están los mejores amigos de Frederick, el capitán Kirk y el teniente Ryan, que al igual que a él, la guerra les ha dejado huella, y por otro las dos mejores amigas de Briana, Elisabeth y Olivia. En las próximas entregas se podrá disfrutar de las historias de amor entre estos últimos personajes, pero de momento nos quedaremos con la de Briana y Frederick que, por lo menos a mí, me ha hecho pasar unos ratos estupendos. Enlace: https://atravesdelaromantica.. |
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