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Charlie Donlea es un autor que llevaba años viendo por redes sociales, pero del que únicamente había leído una novela. “El crimen del lago” fue su novela debut, y tras leerla he terminado de confirmar que este autor Sí es para mí, por lo que debería ponerme inmediatamente con sus otros libros. Summit Lake es un tranquilo pueblo en el que nunca pasa nada. Becca Eckersley, una joven estudiante de derecho, se encuentra en la casa familiar preparando sus exámenes cuando una noche sufre una brutal agresión. El asesinato de la joven revolucionará la vida en el pueblo. El secretismo que envuelve el caso, un cuerpo de policía local al que se le retira el caso sin ninguna explicación… ¿Qué secretos escondía Becca? Kelsey Castle, una periodista de investigación, será enviada a Summit Lake para investigar el caso, al tiempo que intenta recuperarse de un evento traumático en su propia vida. La narración se divide en dos líneas temporales, alternándose los capítulos de Becca, lo cuales se remontan a catorce meses antes de su muerte, y los de Kelsey, investigando dicha muerte en el presente. En esta ocasión ese “antes” y “ahora”funciona perfectamente y resulta de lo más efectivo, ya que imprime ritmo a la historia, haciendo que sea una lectura de lo más absorbente. Donlea crea personajes con los que resulta muy fácil conectar. Tanto Becca como Kelsey están muy bien desarrolladas, lo que hace que te impliques con ellas y todo aquello que les pasa. Me gustó especialmente la línea temporal del pasado, ya que hace un completo retrato de Becca. Su personalidad, sus amistades, sus interacciones, sirven al autor para ir sembrando las pistas que permitan al lector armar el puzzle de la muerte de Becca. Consigue llevarte por un camino en el que te hace dudar de todo y de todos. Lo sorprendente, una vez que se revela el misterio, es darse cuenta de que LA PISTA estuvo ahí todo el tiempo, pero que el autor consiguió desviar la atención de tal forma que, cuando sale a la luz, se te queda cara de tonto. La brutalidad del crimen contrasta con la aparente tranquilidad del pueblo, creando una atmósfera que resulta de lo más interesante. “El crimen del lago” es una muy buena historia, bien escrita y con un inteligente giro final que hace que la resolución sea de lo más inesperada. |
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