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Desde que anunciaron su lanzamiento, «Bienvenidos al hotel Caronte» me entró por el ojo. En agosto, la editorial hizo un ofertón y puso todo su catálogo en digital a un (1) euro. ¿Cómo resistirme? Voy a hablaros primero de mi impresión de cada relato y, después, os comentaré los detalles más genéricos que me han llamado la atención, tanto para bien como para mal. Abro las puertas del hotel una vez más para darme una corta vuelta por sus tenebrosos corredores: MUSAS, DE MIGUEL PÉREZ Como entrada a la antología, no está nada mal. Desde hace tiempo he estado formándome en cómo presentar mis relatos a concurso, y en este he reconocido todos los elementos que un escrito con ese destino debe contener. Esto no significa que sea malo, pero lo hace bastante simplón. Como un ejemplo de manual de texto. Me hizo mucha ilusión ver los guiños a «El Resplandor». MALA RALEA, DE SHAHIRA GALUE Le hace falta pulido. La idea está muy perdida entre ramajes que no dejan limpia la imagen final. Veo la acción, pero no termino de verle la lógica al conjunto. Comienza con un hilo suelto que no lleva a ninguna parte, información que no ha aportado absolutamente nada. Con todo, ha sido entretenido. MARISA TEJERO: INFIERNO HOTELERO, DE ALFRED ALMANSY Me ha descolocado su inicio: los dos anteriores asentaban unas bases que Marisa Tejero ha revuelto y tirado por la ventana. Incluso me molestó: sentí que estaba viendo un capítulo de “Aquí no hay quien viva” con su inicio. No es culpa del relato: os recuerdo que mi sentido del humor está roto. Sin embargo, conforme avanzaba, Marisa conquistó mi corazón. Ha resultado ser un relato muy tierno, una salida de la piscina enfangada del hotel para tomar aire antes de retomar el camino del terror. LA MÁQUINA DE HIELO, DE MARINA TENA TENA La de ganas que tengo de leer las obras de esta mujer y lo desencantada que estoy con este relato corto suyo. Se ha centrado mucho en su protagonista y, aunque muestra los elementos de terror que realmente darían escalofríos… están totalmente desperdiciados. Los vemos de lejos y con las luces encendidas, por lo que ni da miedo, ni inquieta ni me ha dado ninguna sensación de las que temo que buscaba. DOS SON MULTITUD, DE CELIA AÑÓ ESPÍ Celia Añó tiene un estilo desenfadado y simpático. Sé enseguida cuando algo es obra suya, su firma es inequívoca. Su historia me ha encandilado sin recurrir a lo fácil. Así que su participación en la antología está más que justificada y, yo diría incluso, necesaria. LAS FLORES DEL INFIERNO, DE AURA BLANCO Es uno de los más largos pero aportan muchísima calidad. Sus personajes protagonistas me han encantado y está narrado en segunda persona. Es un tipo de narrador que considero de los más difíciles de conseguir. Por lo que son puntos positivos. UNA MUJER PACIENTE, DE RAQUEL ARBETETA GARCÍA De repente, la edad media del libro ha aumentado y se ha vestido con los atavíos góticos más siniestros que había. Una historia de venganza, donde el terror procede del ser humano y no de lo paranormal. Y creo que es lo que más miedo me da. Tiene una manera de describir ciertas acciones de su protagonista que resulta perturbador. EL ESCULTOR, DE ELENA MORILLA Pivota en torno a una historia de amor, por lo que para mí es un bajonazo. Me gustó mucho su parte dramática, pero lo primero hace que pierda mi atención. Tiene muchísima exposición de información y poca acción. UN NEGOCIO REDONDO, DE PENÉLOPE FERNÁNDEZ Con sus más y sus menos, las historias que hasta ahora hemos visto me han gustado. Ninguna adolece de falta de nivel, y ojo, que esta tampoco, pero sin duda, considero a este relato el peor de todos. Su rollito rompe toda la atmósfera y usa una táctica que me parece más perezosa de todas: el tramposo. Todo estaba planeado desde el principio, pero no te explico, no te doy pistas, ni mucho menos voy a darte una sola señal implícita de que se había planeado con antelación. LA ASTILLA DEL TIEMPO, DE CRISTINA OGANDO Tres libros he de leer de un autor, tres libros de él me han de gustar, para que a mi podio de favoritos pueda estar. Y Cristina ya lleva dos aprobadísimos con matrícula de honor. No crea nada nuevo, pero tampoco le hace falta. Me gana con su protagonista y su carismazo, con la idea que muestra y no cuenta. Es toda una declaración de intenciones desde la primera frase del texto. LOS MONSTRUOS EXISTEN, DE MARÍA HERNÁNDEZ El gran final, el broche de oro. O, más bien, de plata. Tiene algo en el estilo que hizo que perdiera la concentración, que me dispersara. Se me antojó previsible, y lamentablemente, cierto detalle no me dolió en absoluto porque no tuve tiempo ni datos suficientes para cogerle cariño a cierto personaje. Pero la trama me gusta. En general, una de las mejores cosas que tiene esta antología es su hilo en común de todos los relatos. Se han trabajado mucho la selección y los elementos que todos los relatos debían contener, y realmente parece un texto unificado, casi novela río, en la que cada personaje nos aporta su punto de vista. El nivel, por lo general, es estable (quitando un par de bajones que ya he comentado). Además, está ilustrado y algunas de las imágenes son inquietantes. Enlace: https://cafeinayletras.wordp.. |
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