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Obviamente retrata a la perfección los intereses de una familia, signada sobre todo por intereses monetarios comunes a cuatro hermanos. Para mi sorpresa, después de priorizar las connotaciones del reparto de una herencia, que será el leit motiv de la narración, finalmente no sabemos qué sucedió con ella, aunque lo podemos presumir, y en cambio se destaca la participación de alguien que no es precisamente de la familia. Me gustan los finales abiertos que nos alienta a participar de la historia, pero en este caso permite salir airoso a quien perjudica a los demás no solo económicamente, sino también en la concreción de sus sueños. En algunos tramos la lectura se volvió algo pesada, con el agregado de gestionar sin sentido la participación de quienes pudieron quedar en el olvido a lo largo del hilo conductor sin ocasionar inconvenientes y en cambio dejarsin resolución el tema principal de la obra. |
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