Dímelo a los ojos

Lola es una chica que de pequeña era patosa y le costaba hacer amigos, por eso y después de las experiencias vividas es una persona más bien cerrada en sí misma, pero anhela cosas.

Marina puede parecer la típica chica que ha tenido una vida fácil, pero en casa su madre siempre ha sido muy severa con ella. Haciéndola pasar por inseguridades con su cuerpo.

Roque es carnicero, un hombre que se desvive por su hermana desde que esta perdió a su marido. Pero a la vez siente que no está viviendo su propia vida, si no la de otro.

Fabián es sordo, un hándicap para él, pero que sabe moverse por la vida con soltura. Una persona con inquietudes y ganas de ser más y mejor.

¿Qué tienen en común estos cuatro personajes? Todos ellos están en Irlanda por diferentes motivos y el destino va a querer que sus caminos se mezclen de una manera que van a dejar marca en los otros.

Una ROM/COM cortita, van a pasar un montón de cosas, algunas muy locas, en las horas que van a compartir juntos. Hay días que parece que te has levantado con el pie izquierdo y esto es lo que deben pensar nuestros personajes.

Ellas son mujeres que saben lo que quieren, ellos son hombres que quieren más. Ellas son decididas, aunque con sus miedos e inseguridades; ellos tienen un lado tierno, reflexivo y a su vez juguetón.

Todos ellos tienen algo en común y es que hay cosas que los han marcado en algún momento de su vida y eso les ha dejado ciertas inseguridades, miedos y prejuicios con los que han tenido que vivir, dejar esto atrás no es fácil.

Vamos a tener romance, es cierto que el crecimiento personal de ellos es por donde gira la historia, pero, a veces, encontramos a esa persona en el momento en que menos lo esperamos y cuando el amor llama a tu puerta ¿Quién no quiere abrirle la puerta?

Una historia donde vas a reír, vivir momentos tiernos y reflexiva con ciertos temas que trata la autora de una manera muy natural.