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Este libro he tardado bastante en leérmelo, la verdad, más de lo que pensaba. He de decir que en general, me ha gustado, aunque luego investigando me di cuenta de que no son libros autoconclusivos por lo que ahí me empezó a dar cierta pereza continuar la lectura. Los personajes del libro están muy bien formados, aunque no veo una evolución en las 413 páginas que tienen, siempre tienen la misma personalidad y no veo ningún matiz, supongo que tiene sentido teniendo en cuenta que son policías y agentes que están trabajando en un caso bastante importante, quizás mi personaje favorito es Lucy y Marino, porque son los que más reales veo. Hablando de los villanos, en fin, qué decir. Los terminas odiando e incluso por uno de ellos, sientes lástima y la compadeces, lo que te hace pensar en que no todo es tan fácil de comprender y que la vida tiene matices. La trama, por otro lado, se desarrolla a escalones, a veces ocurren muchas cosas y otras, sin embargo, no ocurre nada y puede capítulos enteros en que sólo se dedique a describir o a narrar hechos sin sustancia, no sé, quizás la autora debería haber dosificado mejor el nudo para que no haya tantas partes ''en blanco'' y otras en las que literalmente te confundes con la cantidad de nombres, lugares y hechos. Hago mención especial en que me ha flipado cómo ha hilado la trama. Tienes que estar pendiente de todos los personajes y hechos pues todos son importantes y tienen una misión concreta, no hay personajes secundarios e incluso si hay alguno que se puede catalogar como tal, tienes que prestarle atención, supongo que por eso se me ha hecho bola a ratos y me ha costado terminarlo. |
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